Los próximos son varios géneros de cartas para un amigo que puedes dedicar, en dependencia del motivo que necesites. Revela a continuación nuestros ejemplos de carta para un amigo. He llegado a confundirme en tantas oportunidades, que temo que pude llegar a lastimarte sin darme cuenta y de que tengo suerte cuando veo que aún permaneces ahí.
Si en estos momentos todo fuera una fiesta nuestra única pareja de baile sería el miedo. Feliz cumpleaños, amigo, prosigue disfrutando la vida como siempre lo has hecho. Entonces, como si me escucharas en donde sea que estés, mi cabeza reproduce algo que tú me afirmarías y que me permite continuar adelante. Es aquí cuando considero que realmente no te has ido completamente y que sigues cuidándome y siendo mi amiga. Espero regresar a encontrarnos para ponernos cada día de todas y cada una de las cosas que nos hemos perdido.
Gracias por haber cuidado de mí todos estos años, y te pido que tienes que ser jamás mi ángel de la guarda. Ten en cuenta que aquí tienes una amiga incondicional para lo que lleve a cabo falta, que continúa leal a ti y te espera a la vuelta. Que muchas veces, en el momento en que tengo un problema, pienso en lo que tu me aconsejarías y trato de continuar esa pauta. Y contigo las penas siempre terminan siendo mucho más llevaderas, y las alegrías mucho más enormes. Nuestra amistad vale mucho más que mi orgullo, y es el instante de solicitarte perdón y ponerme a tu servicio para arreglar todo aquello que ha quedado pendiente. Estoy seguro de que nuestra amistad resistirá, una vez más, la prueba de las adversidades.
A lo largo de todos estos años hemos construido una amistad tan fuerte que nada puede destruirla, y ella radica en comunicar lo bueno y lo malo, con esa generosidad y empatía que nos hace más fuertes. El día de hoy celebro nuestra amistad por tantos años de cosas buena, y deseando que esto dure para toda la vida y que jamás nos separemos. Para todo lo demás, deseo hacerte acordar que tienes una fuerza interior que lo puede todo, y que por amargo que te parezca el instante siempre y en todo momento encontrarás la forma de salir adelante. Este instante pasará y lo recordaremos juntos como una mala experiencia y solamente. Y que no queden como expresiones vacías, sino como un firme deber a fin de que no vuelva a ocurrir.
Le escribí a un amigo por correspondencia durante años en la escuela principal y secundaria. Entonces, si deseas ofrecer un obsequio especial a aquella persona que se debió espantar por la pandemia, una carta es una buena opción opción alternativa. Al redactar impregnas algo de tu esencia y transmites conmuevas únicas, amor y dedicación, lo exacto en tiempos de Navidad. Una carta a un amigo puede deberse también a motivos de petición de algún favor.
Has logrado hacerme plañir con tus putas palabras de aliento; sabes que te quiero y que la palabra hermano en un caso así no es una manera de hablar. Dani, es muy noble tu causa, pero, lógicamente, no tienes idea lo que es tener hijos. Tú andas soltero y el dinero es tuyo y no tienes que repartirlo, sea poco o bastante. Tu amigo tendrá que alimentar a su mujer y a sus hijos, con lo que la tarta se divide en trocitos más pequeños. Tener hijos, ver que pasan los días y que no entra dinero a casa es una mala ecuación.
Pero yo no te voy a perder a ti pues de ahora en adelante, vamos a ser mucho más unidos que antes. La escritura en una carta a un amigo debe ser llana, próxima y natural, prestando mayor atención a la simpatía que a la propia redacción. Por supuesto, esta informalidad y este acercamiento solo se generará en el momento en que el remitente de la carta sea verdaderamente un amigo. Pienso que esas son palabras muy bonitas con un enorme poder, que no pueden quebrarse de manera fácil. Pero a veces también surgen problemas que pueden distanciarnos de nuestros seres mucho más queridos, y eso hace bastante dolor. Exactamente el mismo dolor que siento yo en este momento al tenerte tan cerca y tan lejos al unísono.